El Triage START (Simple Triage And Rapid Treatment – Triage Simple y Tratamiento Rápido), es uno de los métodos de clasificación de heridos más usados por los servicios de emergencias en España. Este método nació en 1983 de mano del Hospital Hoag y los Bomberos de Newport Beach. Con este método de Triage, se clasifican los heridos por colores según su gravedad.
- ROJO – Son los heridos de gravedad extrema, no puede demorarse su asistencia. Son urgencias absolutas. Algunos ejemplos pueden ser: RCP presente, shock, dificultad respiratoria, TCE grave, hemorragia importante.
- AMARILLO – Pacientes graves, con una urgencia relativa. Pueden esperar hasta unas 3 horas. Ejemplos: riesgo de shock, fractura abierta de femur, fractura de pelvis, quemaduras graves, inconsciencia, TCE.
- VERDE – Heridos leves, no requieren asistencia inmediata, pueden demorarse si no hay riesgo vital. Ejemplos: fracturas menores, heridas o quemaduras menores, contusiones, abrasiones, cuadros de ansiedad.
- NEGRO – estos son los pacientes fallecidos o irrecuperables.
La prioridad con la que se clasificarán los heridos se valorará según los siguientes aspectos:
- ¿Puede caminar?
- ¿Respira?
- ¿Tiene circulación (pulso radial o relleno capilar)?
- Estado mental.
Durante el Triage SOLO SE PERMITEN las llamadas “MANIOBRAS SALVADORAS“, en otras palabras:
- La apertura de la vía aérea.
- El taponamiento de hemorragias.
Este método de Triage, es un método rápido y sencillo, que permite a las asistencias clasificar a las victimas en pocos segundos. El Triage lo realizará el primer interviniente preparado para ello que llegue al lugar y cuente con material de Triage.
Algoritmo del proceso de Triage Start
- ¿El herido puede caminar?
- SI el herido comprende la orden y puede obedecer (camina), se clasifica VERDE, por lo que podrá esperar. Deberemos indicarle una zona segura de espera en la que serán agrupados y supervisados por personal cualificado.
- Si no puede caminar se valora su respiración.
- En caso de que no respire, se intenta la apertura de la vía aérea (maniobra salvadora) con la maniobra Frente-Mentón o tracción mandibular.
- Si la víctima NO RESPIRA, se clasifica como NEGRO finalizando el Triage de esta víctima. La misma se dejará en el lugar, salvo que impida la atención del resto de víctimas.
- Si la victima SI RESPIRA, se valorará su frecuencia respiratoria.
- Si su frecuencia es mayor de 30 respiraciones por minuto se cataloga como ROJO.
- Si su frecuencia respiratoria es menor de 30 respiraciones por minuto, pasamos a la siguiente valoración.
- Se evalúa su perfusión.
- Se comprueba el relleno capilar, considerándose alterado si éste es mayor a 2 segundos. No obstante, debido a que este método es poco fiable en condiciones de baja luz, bajas temperaturas, uñas pintadas y otros, se suele preferir tomar el pulso radial.
- Si NO tiene pulso radial, se considera ROJO.
- Si tiene pulso radial pasamos a la siguiente valoración.
- Se comprueba el relleno capilar, considerándose alterado si éste es mayor a 2 segundos. No obstante, debido a que este método es poco fiable en condiciones de baja luz, bajas temperaturas, uñas pintadas y otros, se suele preferir tomar el pulso radial.
- Se evalúa el estado mental.
- Lo haremos con dos simples preguntas. Un ejemplo puede ser, ¿Cómo se llama?, Tóquese la nariz.
- Si la víctima NO responde o parece confuso se clasifica como ROJO.
- Si la víctima responde, se clasificará como AMARILLO.
Cuando hayamos ejecutado el algoritmo en el paciente, le colocaremos la tarjeta correspondiente y avanzaremos al siguiente, solo nos detendremos en una víctima para realizar las maniobras salvadoras mencionadas con anterioridad.
Un inconveniente que tiene este método, es que no toma en cuenta el estado de un paciente moribundo, es decir, el paciente vivo pero que no tiene posibilidades de sobrevivir, al que se clasificará como ROJO. En este caso, en el Triage que se realiza en el puesto avanzado y hospital de campaña se valorará de nuevo la situación.